Generalmente los empresarios, sobre todo los jóvenes, optan por invertir cantidades considerables de dinero (o desorbitantes) en campañas de marketing y, después de un tiempo, se dan cuenta que todo ese capital no sirvió para atraer el número de clientes deseado o no fue suficiente para generar lealtad a la marca. Entonces, ¿por qué si se pagó por una campaña, no funcionó?, ¿qué salió mal? Contar con las mejores herramientas de marketing no es suficiente. A diferencia de lo que ocurría en el pasado, se ha demostrado que hoy en día el cliente es el responsable de dos de las terceras partes de la compra de un producto o servicio.
Y es que ahora más que nunca los clientes encuentran gran conveniencia en investigar cuáles son sus opciones de compra a través de la Web, es más, está comprobado que el 80% de las sesiones de Internet inician con una búsqueda. De ahí que los ejecutivos de hoy investigan y entienden las tendencias de su industria y las soluciones disponibles a sus problemas de acuerdo al comportamiento de igual manera en Internet.
Ahora bien, todo proceso de fidelidad de marca comprende tres fases principales en lo que al marketing se refiere:
De los tres, el día de hoy nos enfocaremos en el engagement (¿qué es lo que estás vendiendo?). En este momento histórico donde lo digital se vuelve a cada segundo parte de la cotidianidad del ser humano, los consumidores están dispuestos a compartir su vida, sus costumbres y sus actos contigo, tal vez sea momento de que tú hagas lo mismo. Volvamos al principio, ¿estás seguro de que aquello que dicen tus redes sociales, tus banners y en general tu marca, dicen lo correcto? Conscientes de la importancia que los contenidos tienen hoy por hoy, en G2 consultores te presentamos una estrategia para generar los contenidos ideales para que puedas llegar de manera efectiva al corazón de tus clientes.